Despegue

En el último artículo repasamos el procedimiento de prelanzamiento del rotor. Una vez que ese procedimiento se ha completado, estamos listos para iniciar el despegue de nuestro autogiro.

¿Cómo se realiza?

Cuando el autogiro ha alcanzado las revoluciones necesarias -entre 180 y 200 r.p.m.- movemos suavemente la palanca de mando totalmente hacia atrás, hasta el tope, soltamos los frenos de parking e incrementamos de forma progresiva y continuada la potencia del motor mediante la palanca de gases.

CUIDADO: asegúrate de que la palanca de mando está totalmente retrasada antes de iniciar el despegue. Una carrera de despegue con la palanca adelanta puede tener consecuencias fatales.

Mantenemos el alineamiento con la pista usando los pedales.

En cuando la rueda de morro se levante del suelo, cederemos la palanca de control hacia adelante para mantener la rueda a unos pocos centímetros del suelo mientras metemos el resto de la potencia del motor haciendo que el autogiro acelere.

El autogiro se levanta solo y mantendremos un vuelo nivelado hasta alcanzar una velocidad de 60mph (mejor ratio de ascenso). El autogiro despegará con una senda de subida suave y uniforme.

Una vez alcanzada la altura deseada, quitaremos potencia y ajustaremos el motor y nivelaremos el autogiro para mantener la velocidad deseada. Para facilitar el vuelo nos ayudaremos del compensador.

¿Qué ocurre si tenemos viento cruzado?

Básicamente, el procedimiento de despegue no cambia al tener viento cruzado, pero es necesario que utilicemos los mandos de forma adecuada.

En condiciones de viento la palanca de mando debe moverse hacia el viento para mantener la dirección del autogiro, mientras que los pedales deben usarse para mantener el alineamiento con la pista (pisar el pedal del lado contrario del viento).

Según las características dadas por el fabricante, ELA en este caso, el máximo viento cruzado admisible para despegue y aterrizaje es de 16 kn.